Esa mañana nos tocó madrugar, a las 6.00h ya estábamos en alto, teníamos que ir a Galle y coger el tren de las 7.55h con destino a Colombo y de allí ir hasta Negombo a pocos kilómetros, justo al lado del aeropuerto.
Le habíamos preguntado al del hotel por la frecuencia de autobuses en domingo y nos dijo que había menos frecuencia pero que empezaban de madrugada como cualquier día. Por desgracia perdimos el bus de las 6.45h por bien poco y estuvimos esperando el siguiente unos 20mins y nuevamente nos cobraron 160lkr a cada uno por el trayecto, maletas incluídas. Cada vez que nos habíamos subido a cualquier vehículo en los últimos 15 días los conductores iban como el rayo, incluso el día antes el conductor del bus iba a una velocidad que nos hizo temer por nuestra integridad física en más de una ocasión, pues el del domingo era el conductor prudente, Ley de Murphy a la ceylanesa, si teníamos más prisa que nunca, el conductor iba más lento que nunca, ¿resultado? perdimos por pocos minutos el tren de las 7.55h, por suerte al revisar el horario (colgado en el anterior post) y vimos que a las 8.15h así que bajamos a toda velocidad del bus y cruzamos la calle llena de tráfico al más puro estilo película de Hollywood y llegamos a tiempo para comprar los billetes y subirnos al tren pocos minutos antes de que arrancara.
Cogimos el billete en 3ª clase por 200lkr cada uno. Habíamos leído que el trayecto en tren de Galle a Colombo tenía muy buenas vistas al circular siguiendo la costa. Cuanta mala leche hay por algunos blogs. Durante el trayecto a ratos ves el mar, pero de ahí a que sean buenas vistas... está plagado de poblados a base de chavolas, descampados varios y zonas convertidas en verdaderos vertederos, así que no esperéis gran cosa.
A las 10.15 estábamos en la estación Fort de Colombo, casi donde empezamos nuestra andadura. Preguntamos en ventanillas por el tren hasta Negombo, y nos costó una barbaridad, entre el pasotimos de los trabajadores, la mala educación de la mayoría de ellos y los conductores de tuk-tuks dando la brasa llegaron a conseguir sacarme de mis casillas y que a todos les acabara gritando. Finalmente un taquillero nos informó que hasta las 13.30h no salía un tren hacia Negombo, así que cambiamos de planes y decidimos irnos en bus. Justo delante de la estación de tren hay varios autobuses pero al preguntar todos nos señalaban hacia más atrás. Finalmente encontramos un policia que nos indicó que de aquella estación de buses no salía ninguno a Negombo y que teníamos que andar unos 500m hasta la siguiente.
Empezamos a andar y al poco empezamos a ver autobuses, al parecer hay dos estaciones de autobuses enormes, una frente a la otra, y por seguir las indicaciones de los locales nos metimos en la incorrecta y estuvimos un buen rato yendo de autobús en autobús preguntando por los buses a Negombo, hasta que uno nos indicó que no era esa estación sinó la de enfrente.
La correcta es la que os viene a la izquierda según venís de la estación de trenes, la Colombo Central Bus Stand, y una vez allí tenéis que encontrar el autobús número 240 que es el que os llevará a Negombo en un trayecto de 1h a pesar de los sólo 38kms que hay. Le enseñamos la ubicación de nuestro hotel al que vende los tikets en el bus y nos avisó cuando estuvimos a 1 parada del sitio.
Una vez allí tuvimos que andar 10mins hasta nuestro hotel, a pesar de que un cartel marcaba 100m... creo que se habían olvidado un 0. Nuestro último alojamiento en el país era el Hotel Amagi Aria, un hotel de varias plantas con vistas a la laguna de Negombo, cerca de nada, pero tampoco queríamos ya hacer otra cosa que no fuera descansar las últimas horas en Sri Lanka, así que nos instalamos en nuestra habitación con salida directa a la piscina y toda la tarde la dedicamos a estar en remojo y tomándonos algo en la terraza mientras oscurecía sobre la laguna con estampas como esta.
Por la noche cenamos en uno de los dos restaurantes del hotel en el que hacían un buffet italiano que resultó estar fabuloso con toda una sala de buffet de postres incluídos. Y de madrugada contratamos el servicio de coche hasta el aeropuerto por 1500lkr que ofrecía el hotel ya que teníamos que estar a las 5.00h allí para finalizar nuestro viaje... o no, que aún nos quedaban 4 días en Maldivas...